A través de este proyecto, que se desarrolló en las regiones de Amazonas, Apurímac, Ayacucho, Cusco, y Ucayali, se esperaba
contribuir a generar condiciones para el desarrollo integral de niñas y niños desde su nacimiento hasta la culminación de su educación
primaria. Se aspiraba a que la niñez peruana, especialmente la indígena rural de las zonas mencionadas, estuviera mejor preparada
para entrar a la escuela secundaria y que al culminarla pudiera contribuir al desarrollo socioeconómico de sus comunidades.